El diseño de Bernhard Heine, similar a la motosierra moderna, corta el hueso rápidamente, sin que el paciente tenga que soportar los golpes de un martillo y un cincel, o las sacudidas de una sierra de amputación normal.
Ilustración fotográfica del Museo Nacional de Salud y Medicina por Matthew Breitbart/liberado
Si alguna vez se ha preguntado por qué se inventaron las motosierras, probablemente se sorprenda al saber que no fue para cortar madera. La primera motosierra se inventó originalmente para ayudar en el parto. Si eso evoca imágenes perturbadoras en su cabeza, no está solo.
«Suena horrible. Lo fue», dice el Dr. Anthony Tizzano, obstetra y ginecólogo en Ohio. Tizzano tiene una de las colecciones privadas más extensas de artefactos de obstetricia y ginecología y libros de medicina en los Estados Unidos, todos alojados en el Museo de Obstetricia, Ginecología, Antigüedades Médicas e Historia de la Salud de la Mujer de Tizzano.
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Si bien ciertamente es digno de vergüenza, la motosierra médica desempeñó un papel vital durante el parto en un momento en que no había opciones más seguras disponibles en casos de parto obstruido, y mucho antes de que alguien se diera cuenta de que el mismo mecanismo podría ser una bendición para la industria maderera.